Tal es así que según Pablo Picasso –al menos según algunas de sus obras- no se puede mirar la realidad de una sola manera, porque la realidad es en sí muchas maneras. El cubismo fragmentó la realidad, y a través de su técnica alcanzó la deformación. Porque la realidad, según el cubismo, es una deformación. O bien, es una realidad deformada.
Sin embargo, esta es mi lectura. Y mi lectura es un solo costado. El perfecto razonamieto cubista debería poder contradecirse, derrotarse a sí mismo, y así alcanzar la incoherencia. Porque la opinión es una forma de incoherencia.
No podría existir una perpectiva cubista. Deben coexistir todas.
Existir y no existir, de manera simultánea.
jueves, 4 de octubre de 2007
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